Para algunos autores, el llamado padre de la Medicina, Hipócrates, además de realizar grandes aportaciones a la ciencia es conocido por la frase, “que el alimento sea tu medicina y la medicina tu alimento”. No es casualidad que viviera 90 años por aquel entonces, que la esperanza de vida era mucho más baja en la antigua Grecia.
La alimentación debe ser el primer recurso de cara a mantener una vida saludable. Con esto te quiero decir que no solo debes alimentarte para “llenar la tripa”, ni tampoco por motivo únicamente de placer.
La ciencia está continuamente demostrando que hay alimentos saludables y otros perjudiciales. Podría hablarte de alimentos que curan y otros que nos hacen enfermar durante horas.
Lo lógico es pensar que si quiero mantener una vida lo más saludable posible, debo ingerir alimentos que curan y por lo contrario debo evitar que los alimentos perjudiciales pasen por mi boca. El problema es que los alimentos que nos enferman suelen estar ricos y eso no ayuda demasiado.
Sin embargo, nuestro cuerpo tiene capacidad de soportar una pequeña cantidad de estos alimentos “malos”. Por lo que la buena noticia es que de vez en cuando podemos “pecar”, si el resto de las comidas las hacemos convenientemente.
Mi propósito es darte en las tres próximas entregas consejos útiles para comer sano. La primera irá dirigida a mencionar los nutrientes “sanadores”.
Te animo a que comas bien, es la mejor inversión que puedes hacer en tu salud, porque tenemos que durar cuantos más años, mejor.
Artículo escrito por Israel González
Si te ha gustado el artículo compártelo!
Deja tu comentario